Fitur, la única feria turística del mundo que no ha dejado de celebrarse por la pandemia, abrirá sus puertas en Madrid en exactamente una semana. El sector privado y las instituciones del archipiélago se enfrentan al reto de mantener el peso del mercado nacional, que en los dos últimos años ha permitido salvar la temporada ante la bajada de alguno de los que habían sido los principales mercados emisores de viajeros para las islas.