EDUCACIÓN

Oviedo acoge una jornada de PROA+

La Consejería de Educación organiza mañana en Oviedo una jornada de buenas prácticas del Programa para la Orientación, Avance y Enriquecimiento Educativo (PROA+). La consejera Lydia Espina y la directora general de Evaluación y Cooperación Territorial, Mónica Domínguez, inaugurarán el acto, mientras que la ministra de Educación y FP, Pilar Alegría, protagonizará la clausura institucional.

Chisco García | Europa Press

Oviedo | 26.06.2023 17:30

Aula del colegio | PP de Elche

La jornada, que reunirá a cerca de 400 asistentes, contará con la presencia de ponentes de centros de educativos de Asturias, Andalucía, Castilla y León, Cantabria y Cataluña, que expondrán sus experiencias innovadoras con el programa.

Además, el director general de Evaluación, Ordenación y Equidad Educativa, David Artime, moderará una mesa redonda sobre la transformación de los centros a raíz de la implantación del PROA+. La programación concluirá con una ponencia sobre motivación a cargo de Ramón Barrera, experto en formación docente, liderazgo y creatividad.

El PROA+ es un programa que pretende reducir las tasas de abandono escolar temprano y configurar un sistema educativo más equitativo y justo. El destinatario es el alumnado de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato más vulnerable: desde estudiantes con necesidades asistenciales, escolares o socioeducativas a los que presentan altas capacidades, dificultades específicas de aprendizaje o que se han incorporado de forma tardía al sistema.

Los programas benefician tanto a la red pública como a la concertada. El Principado tiene firmados, en la actualidad, un total de 89 contratos PROA+, de los que 79 son con centros públicos y los 10 restantes con la enseñanza concertada. El programa supone una inversión pública de nueve millones de euros durante el trienio de vigencia 2021-2024.

Para seleccionar los centros que desarrollan los PROA+, Educación estableció como criterios que tuviesen, al menos, el 30% de alumnado vulnerable y que estuviesen localizados en el ámbito rural, en zonas deprimidas o con gran dispersión de la población.

En el caso de los centros públicos, se utilizó el índice socioeconómico, ponderado por el criterio de ruralidad, para elaborar la lista definitiva de beneficiarios. En los concertados se valoró el proyecto presentado.