Las familias han cambiado mucho. Y no es lo mismo ser niño hoy que antes. La Asociación Española de Pediatría advierte que han llegado a detectar hasta un 47% de niños con trastornos de salud mental. Y la implicación de las familias es fundamental para evitar problemas. Isabel advierte que la situación es preocupante.
Los abuelos ejerciendo de niñeros, niños apantallados, las rabietas evolutivas o el fracaso escolar porque no se detectan dislexias, cómo viven los niños el divorcio, el acoso, el trastorno de déficit de atención o hiperactividad, depresión, ansiedad, estrés y la inteligencia emocional son algunos de los temas que se tratarán en las charlas. La próxima es este miércoles, y tratará sobre aprender a poner límites, decir que no.
Que nuestros hijos sean buenas personas debería ser el objetivo prioritario para los padres. Y pasar el mayor tiempo posible con ellos. Sin embargo, se ve en demasiadas ocasiones que se dedica más esfuerzos a otros aspectos de la educación secundarios.