SPORTING

Una profunda y necesaria renovación

La peor temporada del club en toda su Historia deja paso ahora a unos meses de verano en los que Abelardo Fernández deberá abanderar la reestructuración a todos los niveles de la entidad rojiblanca, para evitar que el declive acabe en tragedia dentro de un año

Juan Gancedo

Gijón | 30.05.2022 12:15

Protestas | OCR

Se acabó la temporada de la vergüenza, y como se suponía las consecuencias y responsabilidades en el Sporting serán mínimas. Javier Fernández mantendrá su confianza en la mayoría de personas que tiene a su alrededor y sólo Abelardo Fernández se presenta como savia nueva para tratar de que algo cambie en el club. Javi Rico seguirá, Fran Rico se incorpora, en el Consejo como mucho un cambio o ninguno y en Mareo todo igual, con Manuel Sánchez Murias haciendo y deshaciendo a su antojo pese a la mediocridad deportiva de los equipos y sus técnicos de confianza.

La primera plantilla sufrirá una profundidad renovación. A día de hoy hay 11 bajas directas: los seis cedidos (Kravets, Jony, Berrocal, Puma, Calavera y Eric Ramírez) y 5 que acaban contrato (Babin, Valiente, Berto, Pablo Pérez y Borja López). De estos últimos sólo Borja y Pablo tendrán oferta de renovación, a la baja, por dos temporadas, mientras que sobre los cedidos sólo hay intención de recuperar a Jony, aunque es una operación muy complicada. Al de Cangas de Narcea le quedan dos años de contrato con la Lazio, y con una ficha absolutamente prohibitiva para el Sporting. Su regreso dependerá de su intención de hacerlo, no hay más.

Otros jugadores con contrato en vigor podrían marcharse también, bien por no contar para los técnicos (Nacho Méndez, Bogdan o Campuzano), bien por ofertas que puedan llegar a Mareo y que el club tendría que aceptar por su delicada situación económica: Manu García, Fran Villalba, Gragera, Pedro o Rosas. El verano será largo y el Sporting 2022/2023 se parecerá muy poco al que ayer se quedó de vacaciones.

Y mientras tanto la afición ayer mostró su malestar en los aledaños de El Molinón, con una protesta en la que participaron un millar de aficionados que tardaron en entrar al estadio. Los gritos de 'Fernández Vete Ya', 'Directiva Dimisión', etc, etc.. no se repitieron después en el interior (salvo momentos muy puntuales) con la afición rojiblanca aplaudiendo a Las Palmas por la victoria que dejaban sin opciones de play-off al eterno rival. Triste broche final a la temporada más bochornosa que se recuerda en el sportinguismo.