Los 23 vecinos desalojados de una quincena de masías de la parte alta de LLedó han iniciado el regreso a sus hogares una vez estabilizado el incendio que se declaró ayer por la tarde.
Su alcaldesa, Teresa Crivillé, ha subrayado que "el trabajo conjunto de las dotaciones de bomberos de Teruel y Cataluña ha sido fundamental a la hora de controlar la situación tan rápidamente".
Crivillé también ha insistido en que la utilización de la balsa para agua potable que el ayuntamiento de Lledó construyó el año pasado para abastecer al municipio, "ha sido crucial, por lo que hay que seguir reivindicando la activación de las balsas laterales del Matarraña".