Zaragoza |
Ya es una realidad, el acelerador lineal del hospital San Jorge de Huesca ha comenzado a funcionar. Esto significa que en torno a 500 pacientes con cáncer en la provincia de Huesca ya no tendrán que desplazarse hasta Zaragoza para recibir sesiones de radioterapia. Viajes de casi una hora en taxi que facilita la Asociación Española contra el Cáncer, pero que supone un trastorno para los pacientes, sobre todo después de las sesiones.
Desde la Asociación Española Contra el Cáncer en Huesca, la psicooncóloga Clara Martínez, explica el caso de un paciente para el que le suponía una gran ansiedad y miedo pensar en que tenía que trasladarse hasta Zaragoza para recibir las sesiones de radioterapia en un entorno diferente y fuera de su zona de confort. Tanto era el malestar que le generaba que incluso se planteaba no recibir el tratamiento. El conocer que podría ir al hospital de Huesca, le supuso un gran alivio.
Este es un ejemplo de cómo los traslados continuos, cada paciente necesita un número de sesiones diferentes, pueden afectar también a los tratamientos. El servicio de taxi, como los servicios que ofrece la Asociación Española contra el Cáncer, es gratuito para los pacientes, pero son muchas otras necesidades de logística que necesita cada uno de ellos.
Se calcula que por cada 200.000 habitantes debería haber un acelerador lineal, Huesca era una de las cinco provincias de España que no lo tenía, otra de esas cinco provincias es Teruel. El presidente de la AECC en la provincia turolense, Miguel Ángel Sauras, ve complicado que se pueda contar este año con un acelerador en la provincia tras las reuniones mantenidas con el departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón.
Espera que en 2025 sea una realidad para que los pacientes no tengan que trasladarse a Zaragoza para recibir la sesiones de radioterapia.