Ha llovido de forma intensa y durante varias horas en la capital oscense, lo que ha provocado un desprendimiento de tierra en la carretera de Barbastro, en la prolongación del paseo de Ramón y Cajal. Ha caído una piedra y además se han detectado algunas grietas en el talud. Sobre el terreno trabaja una máquina y se está a la espera de otra, de brazo de mayor longitud, pero hasta que cesen las lluvias y seque el terreno, esa máquina no podrá actuar en la zona. Por tanto y como mínimo, hasta el próximo martes no se acometerán los trabajos y el sentido de salida de Huesca seguirá cerrado, con desvío provisional por la calle División 52. Para los que entran a la ciudad hay un carril habilitado.
Por otra parte, y en relación con la caída de parte de la carretera A1227 en la Sierra de Guara, la Dirección General de Carreteras estudia la instalación de un pequeño puente con dos estribos de hormigón que, ante futuras lluvias, permita desaguar por debajo sin afectar a la vía. Una solución definitiva que esperan tener lista en el plazo de dos o tres meses.