La incidencia del coronavirus en Aragón ha ido descendiendo esta última semana y ya se sitúa en los 433 positivos por cada cien mil habitantes en catorce días. Las hospitalizaciones también se reducen; ahora mismo hay 216 pacientes de Covid en camas convencionales y 9 en UCI, una de las cifras más bajas de los últimos dos años.
Por eso, la consejera de Sanidad, Sira Repollés, considera que esta última ola ya está remitiendo en Aragón y la situación está bajo control. "Podemos decir que estamos en un franco descenso y, con todas las precauciones necesarias como siempre, estar un poco más tranquilos porque la situación está controlada", ha señalado.
El Departamento de Sanidad sigue a la espera de que el Centro Nacional de Microbiología ratifique el primer caso de viruela del mono en Aragón, con la muestra que le remitieron el fin de semana. Aunque ya se ha realizado la encuesta epidemiológica para tener identificados a todos los contactos del paciente, no se activarán los protocolos de aislamiento hasta que los resultados de las pruebas confirmen el diagnóstico.
La Comisión de Salud Pública valora este martes el protocolo de detección y manejo de esta patología. La consejera Repollés ha reconocido, en este sentido, que aún no está claro si será necesario recuperar las vacunas contra la viruela.