Esta es una de las conclusiones del estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre destinos turísticos para el que han recopilado la opinión de 6.854 viajeros europeos sobre su nivel de satisfacción en sus últimos viajes a ciudades de la UE y también a otros países más allá de Europa.
Las puntuaciones más altas de satisfacción general dentro de España las obtiene Granada, con un 87 %, y después le siguen Bilbao y Palma, que logran un 84 %.
Fuera de España también crecen en popularidad otras ciudades menos exploradas como Luxemburgo y Burdeos, que han sorprendido de forma grata a los visitantes que buscan experiencias únicas fuera de los circuitos turísticos más comunes.
Los encuestados han opinado sobre diferentes aspectos de los destinos que han elegido: la satisfacción general, el transporte público, las oportunidades de compras, la oferta cultural y la sensación de seguridad.
En cuanto al transporte público, Copenhague lidera con una puntuación de 85, seguido por Munich y Ámsterdam con 83 y 82 respectivamente. De ellas destacan su modelo de movilidad sostenible y que están bien estructuradas.
Destinos como Budapest y Estambul sobresalen como opciones más asequibles para los turistas. Budapest alcanza una puntuación de 75 en términos de coste de vida asequible.
Madrid (84) y Londres (83) son reconocidas como centros de moda, y Granada y Málaga se valoran de manera especial en hospitalidad, con puntuaciones de 84 y 83, respectivamente.
En cuanto a la oferta cultural y monumental, Roma se lleva la máxima puntuación de 89, seguida de cerca por Granada con 88.
Dublin y Copenhague son percibidas como los destinos europeos más seguros, con puntuaciones de 86 y 84, respectivamente, frente a ciudades como Nápoles y Barcelona, que presentan mayores preocupaciones de seguridad, con puntuaciones de 64 y 65.
Fuera de Europa, destinos como Japón, Australia e Indonesia, son muy valorados por ofrecer una combinación de cultura, hospitalidad y seguridad.
Sin embargo, otros como Santo Tomé y Príncipe, Brasil y Marruecos reciben puntuaciones más bajas debido sobre todo a limitaciones en oferta cultural ya percepciones de seguridad más bajas.