Italia 9 Japón 1

Había mucha expectación para los primeros test de MotoGP en Malasia y después de tres intensos días son varias las conclusiones que podemos sacar. Por un lado Ducati asusta, con siete de sus motos entre las nueve primeras y deja bien claro que son los favoritos al título. En estos momentos en los que la aerodinámica tiene un papel clave, están claramente por delante del resto y mucho van a tener que cambiar las cosas si queremos ver otras motos en el podio, aunque sus vecinos de Aprilia han sido muy rápidos en Malasia y parece que de nuevo han vuelto a dar un paso adelante.

Por otro lado hemos podido comprobar el buen estado físico de Marc Márquez, después de dos años muy complicados y cuatro operaciones en su brazo derecho, por lo que no cabe duda de que el ocho veces Campeón del Mundo podrá afrontar la temporada sin problemas. Todo lo contrario ocurre con su moto, a pesar de que la marca del ala dorada llevó hasta cuatro prototipos diferentes, no han logrado de momento las mejoras suficientes necesarias para dar la batalla. Marc no quiere una temporada en la que tenga que arriesgar más de la cuenta debido a la falta de competitividad de su moto y ha priorizado en elegir una buena base que sirva para la futura evolución y espera que en los siguientes test de marzo en Portimao den el paso necesario de la mano de su nuevo director técnico, Ken Kawauchi, al que por cierto conocen muy bien sus compañeros de marca Joan Mir y Álex Rins estando ambos en Suzuki.

Si Honda está con serias dudas en cuanto a la evolución de la moto, lo mismo podemos decir de Yamaha, KTM y Gas Gas, con la primera Yamaha de Fabrio Quartarario en el puesto 17, a más de un segundo de Luca Marini y la primera marca austriaca con Pol Espargaró en el puesto 1, lo que deja bien claro que hoy en día las marcas japonesas y austriaca están un paso por detrás y una muestra muy clara es que nueve de los diez pilotos más rápidos en la combinada llevan motos italianas.

El balance inicial de la pretemporada está claro, toca trabajar en Japón y Austria en busca de claras mejoras para Portimao. El campeonato necesita mitos y espectáculo que le haga recuperar la asistencia en los circuitos y los niveles de audiencia.