El entrenador del Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha asegurado en la Ciudad Deportiva que para el derbi contra el Barcelona, en el Camp Nou, no tienen "exceso de confianza ni tampoco miedo", sino "respeto y conocimiento de lo que va a pasar en un partido muy importante".
El preparador ha reconocido que esta jornada "es especial a nivel emocional para el club y para los seguidores". "Es un enfrentamiento diferente", ha comentado.
A nivel de vestuario, el técnico ha explicado que el grupo llega "emocionalmente bien, sin ansiedades y equilibrados, es necesario afrontarlo desde la tranquilidad".
Quique Sánchez Flores ha confesado que, como hace cada semana, ha visualizado la victoria en el derbi.
"Las cosas para que ocurran hay que imaginarlas siempre ya que en caso contrario es imposible transmitirlas. Sé la dificultad que tiene, pero si no lo veo no lo puedo trasladar a mis jugadores", ha dicho.
Los futbolistas, ha subrayado, "son conscientes de que progresan, pero saben que nos queda terreno por trabajar".
Respecto a la afición, el responsable del banquillo blanquiazul se ha mostrado encantado de que los seguidores estén emocionados con una posible victoria mañana: "Tienen derecho a soñar todo lo que quieran".
El preparador madrileño, de todos modos, ha advertido de que el Espanyol se enfrenta a un rival "que nos exigirá mucho".
Además, recela del supuesto mal momento del Barcelona: "El fútbol siempre ha sido resultadista y cuando ganas menos parece que se colapsa todo, pero sigue siendo un equipo fiable".
Cuestionado por la ausencia de la habitual foto de técnicos, Quique Sánchez Flores ha comentado que se lleva "bien con todo el mundo y estoy con los que quieren estar conmigo".
La versión oficial es que Luis Enrique no pudo atender este compromiso por problemas de agenda.
"Me he considerado una persona muy madura siempre con 25, 30 y 50 años y no estoy para cosas menores. Son pequeñas cosas sin importancia y no me quedo con estos detalles", ha apostillado.