Andrés Iniesta se recuperó a tiempo para la final de Berlín y para liderar con su juego el 1-3 del Barcelona ante la Juventus. No pudo terminar el partido, pero estuvo lo justo y necesario para deleitar en el césped germano y para dirigir la orquesta de un equipo que suma su segundo triplete en seis años. Y la quinta Champions de toda su historia.
El centrocampista fue elegido como el mejor jugador de la final. El capitán culé en el choque fue protagonista en el primer gol del equipo catalán, cuando dio el pase letal al croata Ivan Rakitic que sólo tuvo que empujarla a la red a los cuatro minutos de partido.
El manchego dejó destellos de su calidad en momentos del partido, como un sensacional pase en la segunda mitad al que no llegó por poco Luis Suárez, y a falta de menos de un cuarto de hora fue sustituido por Luis Enrique Martínez que metió en su lugar a Xavi Hernández.
Apenas tiene palabras el de Fuentealbilla para expresar lo que siente: "No se puede pedir más. Los tres títulos, acabar ganando esta Champions... La verdad es que no tengo palabras para expresar la felicidad y lo grande que es lo que ha hecho este equipo esta temporada. Son momentos muy bonitos y muy únicos. Muy complicados de conseguir".
Iniesta desea a la hinchada azulgrana que disfrute de lo conseguido: "Repetir lo logrado en 2009 es algo que muy pocas veces pasa y muy pocas veces pasará. Todas las palabras de elogio se quedan cortas. Es espectacular. Que la gente disfrute de este Barça y de los jugadores".