La final de Milán pasa por el Allianz Arena
El Atlético de Madrid tendrá que resistir 90 minutos en el Allianz Arena (20:45 en Radioestadio) si quiere estar en la final de Milán. Los de Simeone saben que tendrán que luchar más unidos que nunca para llegar a otra final de Champions. En contra tendrán a un Bayern de Múnich que deberán jugar al ataque para marcar al menos dos tantos si quieren estar en Milán. Simeone recupera a Godín y Guardiola jugará de inicio con Ribery.
El Atlético de Madrid aspira a clasificarse este martes (20.45 en Radioestdio) para la tercera final de Liga de Campeones de su historia, para lo cual cuenta con la ventaja de la ida (1-0) y el carácter irreducible de los 'guerreros' de Diego Pablo Simeone, que visitarán a un Bayern Múnich en el que Pep Guardiola se juega su última bala al frente del club bávaro.
El espectacular tanto de Saúl Ñíguez selló el triunfo rojiblanco en la apertura de la semifinal y el Atlético llega con un escenario favorable al Allianz Arena, un estadio donde nunca ha jugado hasta la fecha. El centrocampista canterano formó parte del carrusel de rotaciones que Simeone diseñó el pasado sábado contra el Rayo Vallecano, junto con Antoine Griezmann, Fernando Torres, Koke o Filipe Luis, un descanso que puede resultar fundamental viendo el visible cansancio mostrado en los minutos finales de la ida.
De igual modo, Guardiola viene de dar descanso a piezas importantes como Robert Lewandowski, Xabi Alonso, Philipp Lahm, David Alaba, Thiago Alcantara, Douglas Costa y Arturo Vidal en el último encuentro ante el Borussia Monchengladbach, por lo que ambos equipos estarán con las pilas cargadas antes de otro partido que se prevé muy exigente físicamente.
Además, Simeone tiene la ayuda adicional de volver a contar a dos jugadores fundamentales como Diego Godín y Yannick Carrasco, ya recuperados de sus problemas físicos. El uruguayo portará de nuevo galones en el centro de la zaga en un duelo donde puede resultar clave su carácter, mientras que es más dudosa la participación de inicio del belga.
Así, Tiago es el único jugador lesionado, pero el portugués también ha viajado a Múnich, ya que Simeone ha decidido llevarse a todo el equipo a la ciudad alemana intentando cohesionar aún más a un grupo cuya unidad es su principal fortaleza y que sabe que le espera una dura batalla.
En caso de que logre rentabilizar la victoria de la ida, el Atlético alcanzará a su tercera final de Champions y, de paso, vengará lo ocurrido en la primera hace 42 años, cuando el Bayern le arrebató la gloria continental. Lo haría dos años después de sucumbir ante el Real Madrid en la final de Lisboa, un duelo que podría repetirse si el equipo blanco también elimina al Manchester City.
Lograrlo pasa por salir vivo del Allianz Arena, donde el Bayern encadena once victorias consecutivas en la Champions, a una sola de igualar el récord de la competición que ostenta el Manchester United. Curiosamente, otro equipo español como el Real Madrid fue el último en vencer en este estadio, goleando en la vuelta de semifinales hace dos temporadas (0-4).
LA ÚLTIMA BALA DE GUARDIOLA
"No estoy muerto, todavía me queda una bala", subrayó Guardiola tras su derrota en el Vicente Calderón, consciente de que se encuentra ante su última oportunidad de proclamarse campeón de Europa durante su trienio en el Bayern antes de mudarse a Inglaterra para hacerse cargo del Manchester City.
Tras dejar pasar su primera oportunidad de ganar de nuevo la Bundesliga, una puerta que el Atlético también mantiene abierta en la Liga BBVA tras vencer al Rayo Vallecano (1-0), el Bayern centra todo sus esfuerzos en alcanzar la undécima final de Copa de Europa de su historia y la cuarta desde 2010.
En la ida, Guardiola sorprendió con su planteamiento al dejar en el banquillo a Thomas Mûller y Franck Ribery, que ha reclamado salir de inicio a pesar de su maltrecho físico. La necesidad imperiosa de marcar, e incluso tres goles si su rival logra anotar uno, presumiblemente provocará que el entrenador se decante por un planteamiento más ofensivo. Además, Jerome Boateng ya ha vuelto a jugar tras superar su lesión y podría apuntalar la zaga.
Por ello, los tres aspiran a la titularidad para buscar una remontada que el Bayern ya logró en cinco de las siete eliminatorias continentales que levantó en Múnich tras perder por 1-0 en la ida. Para derribar el muro defensivo 'colchonero', que no ha encajado gol en las seis últimos partidos, Guardiola, más que una bala, necesitará toda su munición.