España se atasca en La Romareda y se complica el pase a la fase final de la Nations League

La selección española volvía a Zaragoza 19 años después para pelear por un billete a la fase final de la Uefa Nations League en un partido ante Suiza, pero no iba a ser, ni mucho menos, el regreso soñado.

Luis Enrique sorprendió desde la alineación dando a entrada al madridista Marco Asensio como falso nueve y dejando en el banquillo a Morata y Borja Iglesias. El resto del equipo sí fue más o menos el esperado, con el centro del campo del Barça y la titularidad de Ferrán y Sarabia en las bandas. Unai Simón sigue siendo el dueño de la portería y la defensa la formaron Azpilicueta, Eric García, Pau Torres y Jordi Alba.

España entró al partido haciéndose rápidamente con el control de la posesión, pero apenas conseguía pisar el área de Sommer. Suiza esperaba atrás e intentaba salir a la contra con peligro buscando a su referencia, Embolo, pero tampoco lograba pisar con peligro el área de España.

Manuel Akanji iba a abrir el marcador de la única forma en que parecía que podía pasar algo en el partido: a balón parado. Pasados los veinte minutos de juego el central se impuso a Pau Torres en un córner botado desde la izquierda por Ruben Vargas.

El gol no cambió el partido y España siguió dominando la posesión pero sin pisar el área suiza y solo Shaqiri estuvo cerca de inquietar a Unai Simón con un disparo fuerte al primer palo que obligó al portero del Athletic a hacer una buena parada.

A la segunda parte sí que salió España a otra cosa. Asensio, Ferrán y Sarabia empezaron a entenderse y a pisar con algo más de peligro el área de Suiza. No iba a tardar en llegar el empate. En el minuto 55, Asensio le dejó un caramelo a Jordi Alba que apareció solo por la banda izquierda para fusilar a Sommer y poner las tablas en el marcador. España le había metido una marcha al partido.

Pero no iba a durar mucho la alegría en La Romareda, pues solo tres minutos más tarde iba a volver a golpear Suiza. Otra vez a balón parado y otra vez a la salida de un córner. Embolo remató un balón en el área pequeña tras pasearse entre un barullo de piernas y se terminó colando en la portería de Unai Simón.

Sarabia contestó a los pocos minutos con un disparo desde la frontal, pero no iba a tardar Luis Enrique en mover el banquillo y cambiar todo el frente de ataque. El asturiano daba media hora a los debutantes Borja Iglesias y Nico Williams. Yeremi Pino fue el tercer cambio.

España estaba mejor y el ritmo siguió siendo el mismo. Pedri lo intentó con un disparo desde el pico del área que obligó a Sommer a hacer una gran estirado y Borja Iglesias estuvo cerca de firmar su debut soñado con un gol, pero su disparo se paseó por el área sin encontrar rematador. También Marcos Llorente, que entró sustituyendo a Pedri, iba a probar suerte con un buen disparo desde la frontal, pero Sommer estuvo muy seguro a la hora de despejar.

Pasaban los minutos y llegaba el nerviosismo. Luis Enrique dio entrada a Carlos Soler por Azpilicueta en la última ventana de cambios y colocó a Llorente en el carril derecho. Fue precisamente Soler el que estuvo cerca de empatar el encuentro con un disparo seco abajo llegando desde atrás que detuvo Sommer con una gran parada.

España se complica así su presencia en la fase final del próximo mes de junio. Está obligada a ganar el próximo martes a Portugal para volver a pelear por el título.