Alemania buscará ante Irlanda del Norte la clasificación para octavos de final de la Eurocopa de Francia tras el 'pinchazo' ante Polonia, partido en el que a los germanos les vale un empate para estar en la siguiente fase, pero en el que buscarán una victoria y muchos goles para asegurar el primer puesto. Los norilandeses saldrán al campo con la intención de ser la sorpresa de la jornada logrando la 'machada' ante el conjunto alemán.
No participaban en un gran torneo desde el Mundial de México'86 y son conocedores de que una victoria ante el conjunto bávaro les pondría en octavos de final por primera vez en su historia. Por el contrario, si empatan o pierden terminarán terceros y se complicarán sus opciones de seguir en la competición. Así, los hombres de Michael O'Neill, que ya tumbaron a Ucrania con un entramado defensivo muy trabajado del que sacaron oro, presumiblemente volverán a plantear una defensa muy agzapada para adquirir seguridad y frenar las internadas alemanas.
Y se sumarán al ataque a cuentagotas para intentar aprovechar cualquier mínima oportunidad que tengan de batir a Manuel Neuer. De este modo, los verdes apelarán a la historia e intentarán reeditar las dos victorias que lograron ante los germanos en la fase clasificación para la Eurocopa de 1984, teniendo en cuenta además que los de Joachim Löw no pudieron pasar del 0-0 ante Polonia en la anterior jornada y que pueden llegar un poco más presionados. No obstante, a Alemania le vale un empate para obtener la clasificación a octavos e incluso para ser primera de grupo si Polonia cae ante Ucrania.
Alemania busca su mejor versión
Y en el caso de acabar con los mismos puntos que los polacos, la diferencia de goles será la que defina las posiciones finales de ambas selecciones. La campeona del mundo querrá volver a mostrar su mejor versión y llevar la batuta del encuentro ante una de las novatas del torneo. Para ello, Löw podría hacer algunos cambios en su 'once' habitual, en el que podría entrar André Schürrle por Mario Götze, que volvió a decepcionar ante Polonia.
Sin embargo, por el que parece que si volverá a apostar será por Mesut Özil, que pese a que en el primer tiempo ante Polonia estuvo 'desaparecido' ha demostrado que, estando a su mejor nivel, Alemania llega con mayor peligro a la meta rival. Por su parte, el seleccionador norirlandés parece que se encomendará al mismo 'once' que venció a Ucrania y que le permitió seguir soñando.