El Atlético choca contra el muro de Mourinho
Atlético de Madrid y Chelsea empatan a cero y la eliminatoria queda totalmente abierta para la vuelta. Los de Simeone llevaron la iniciativa en todo momento y jugaron muy cerca del área de los ingleses, pero apenas dispusieron de oportunidades claras de gol ya que Mourinho puso una muralla que nadie pudo tirar abajo. El resultado obliga al conjunto londinense a ganar en la vuelta y cualquier empate con goles clasificaría al Atlético de Madrid para la final.
El Atlético de Madrid volvía cuarenta años después a unas semifinales de la máxima competición Europea. El Vicente Calderón se puso elegante para la ocasión y se llenó de banderas y camisetas rojiblancas para dar todo el apoyo a su equipo, a sus jugadores, a los once que debían echarse a las espaldas la historia del club. Y por si fuera poco, el rival no era cualquiera, el Chelsea, dueño del portero de los colchoneros que por contrato no podía jugar, y entrenado por Mourinho, que volvía al estadio del equipo y que le arrebató la Copa la temporada pasada. Su presencia es sinónimo de batalla, pelea, y le daba otro gran aliciente al enfrentamiento.
Y los primeros nombres a seguir eran precisamente el de los entrenadores. Tanto los de Simeone como los de Mourinho anteponen el trabajo del equipo, la posición y la estrategia, al juego específico de balón, y prefieren dejar la iniciativa al rival. Y en la primera mitad, los de Mourinho renunciaron completamente la pelota, dejando a los de Simeone crear y llevar la iniciativa. Apenas salieron de su campo y tampoco parecían mentalizados en salir a la contra. Sólo aguantar y desgastarse lo menos posible, y les salió bien. Courtois apenas tocó dos balones sin peligro, pero los porteros de Chelsea, primero Cech, que se lesionó a los quince minutos, y después Schwarzer, apenas intervinieron en la primera mitad.
El Atlético de Madrid aceptó la invitación del Chelsea y se hizo con la pelota desde el primer minuto, pero pronto se dio cuenta de que penetrar la muralla que había puesto Mourinho iba a ser trabajo difícil. A los quince minutos, un saque de esquina muy cerrado de Koke hizo emplearse a fondo a Cech, que desvió de nuevo a córner. En la caída chocó con Raúl García y cayó lesionado. No deja de ser curiosos que con el lío montado con Courtois, que por contrato no podía jugar este partido pero finalmente la UEFA le dio el OK, sea el portero checo del conjunto inglés el protagonista negativo con su lesión. El primer tiro de los de Simeone llegó a los treinta minutos, de nuevo a balón parado, y de nuevo con Raúl García por medio, cuyo remate de cabeza se fue por encima de la portería. Y así se llegó al descanso: Poco juego ofensivo, con dos equipos muy concentrados y con el mismo objetivo, no encajar el gol, pero con el Atlético de Madrid buscando un agujero en el muro inglés.
En la segunda mitad arrancó con el mismo objetivo común de no encajar un gol. Los de Mourinho salieron ligeramente de la cueva y buscaron acercarse a las inmediaciones de la portería de Courtois. Primero una volea de Lampard y después un remate desviado de Fernando Torres nos mostraron las intenciones del Chelsea, que sin embargo seguían más concentrado en volver a defender que en la siguiente jugada de ataque. Pero el Atlético de Madrid también encontrara más espacios en la zaga. Primero Diego lo intentó a la derecha, pero la pelota se fue desviada y después fue Diego Costa de cabeza, pero la jugada fue invalidada.
Mientras el Chelsea seguía a lo suyo, el Atlético iba gozando de llegadas con peligro que no acababan de materializarse en ocasiones claras. Raúl García estaba en todas: Primero fue Filipe quien entró en el área y le dejó la pelota al navarro que no fue capaz de encontrar puerta. Un centro lateral de Juanfran acabó con un nuevo remate del futbolista, pero se fue por encima de la portería y a continuación fue Arda quien remató desviado otro centro desde la banda derecha.
De nuevo Raúl García volvió a rematar por encima del guardameta antes de ser sustituido, y la más clara la tuvo Diego Costa ya en tiempo de descuento, tras un remate de cabeza a pase de Gabi que fue directo a las manos de Schwarzer y el partido acabó con el resultado inicial. el Atlético de Madrid puso el fútbol y la intención de anotar un gol que les pusiera con ventaja, y Raúl García fue el más activo del equipo, pero el entrenador portugués del Chelsea puso una muralla que apenas sufrió fisuras. El Atlético de Madrid lo intentó de lejos, a balón parado y de cerca, pero apenas encontraron puerta. La vuelta queda abierta y menos el empata a cero en la vuelta, cualquier resultado que sea no perder meterá al Atlético de Madrid en la final de la Liga de Campeones.