EN LA BRÚJULA

El cuaderno de Chapu: "El campo irrumpiendo en la ciudad tiene el encanto de lo mágico y lo salvaje"

El cuaderno de Chapu con las notas que ha apuntado del día.

ondacero.es

Madrid |

Hoy traigo las notas de mi Españita de flores de almendro y derrape de tractor por las rotondas. El campo irrumpiendo en la ciudad tiene el encanto de lo mágico y lo salvaje pues trae consigo la escala de lo importante.

Ah, los tractoristas llegan con el sueño la mirada de los mil amaneceres y su épica irresistible de cowboys de Navalmoral de la Mata y se acercan a Madrid con un tranco como como de verso de Alberti en A Galopar cuando lo de las tierras de España, la grande la sola desierta llanura, galopa caballo cuatralbo, jinete del pueblo que la tierra es tuya.

La ciudad los mira a un tipo de una tribu ignota del Amazonas y recuerdan: Anda, si esto lo de los aceituneros altivos les cayó en un examen de cou. Luego, les dicen cómo criar vacas unos tipos para los que el que el campo es un macetohuerto en la terraza de Malasaña, y así es que no se puede. Son héroes de la izquierda el enfermero, el médico, el telefonista y la kelly, pero nunca el ganadero, pues un voxero, aficionado a los encierros a caballo y a cazar con la perrita que apesta a faria, un tipo odioso, heteropatriarcal y feo que te deja el jardín como unos zorros el jardín del ministerio con las huellas del John Deere.

Si los sindicalistas dicen que estos son unos señoritos es señal de que por ahí viene el pueblo de España con sus sombreros de paja y sus fachalecos y sus tractorazos. Si al menos se mearan en las manos y no tuvieran dientes, todavía los acunarían en la matria de Yolanda, pero así bien vestidos se ve que no les sirven. Nadie defiende a los del campo, por eso se defienden ellos mismos.