La carta de Ónega a los papeles perdidos: "¡Ay, si las trituradoras hablaran!"
Fernando Ónega dirige su carta en La Brújula a los papeles perdidos, aquellos que "afectan a todo grupo con poder".
Madrid | 03.02.2021 23:28
Este miércoles fue el día de los papeles perdidos. Y entre ellos hay tres sois de alto valor para coleccionistas. Los primeros fuisteis echados en falta hace dos días Edmundo Bal, de Ciudadanos, y sois tan valiosos que los aprovechó Pablo Casado para sus estallidos y para regalar a Abascal un título de nobleza, regalo de Pedro Sánchez: hombre con sentido de Estado. Sois el informe del Consejo de Estado sobre el decreto de los fondos europeos, entre peñascales roto, como la barca de Lope, o entre legajos extraviado, último misterio nacional.
Ahora en el Parlamento español han puesto el letrero de “se busca” y quizá hagan una comisión de investigación con recompensa para quien de razón de vuestro paradero. Después, una antigua dirigente de Podemos le dijo al juez que algunos miembros del partido borraron mensajes comprometido de 'Telegram'. Otros papeles perdidos, que los guardias tendrán que buscar en la nube, si la nube se deja hurgar.
Y la jornada se cerró, cómo no, con los papeles más famosos del mundo, que sois los papeles de Bárcenas. Esos tenéis fotocopia, la tiene don Luis, que la guardó, previsor como es, para tirar de la manta si condenaban a su mujer. Los manuscritos perdidos, esos incunables, fuisteis entregados por don Mariano Rajoy a las fauces de la trituradora. Eso es lo que cuenta don Luis. Ya se lo había contado al juez en 2013, y hay que dar la revelación como nueva. Que una repetición no estropee la historia de la trituradora. ¡Ay, si las trituradoras hablaran! ¡Ay, si se inventara la máquina que recompone aquellas tiras de papel!
Supongo que eso sería delito, porque sería revelación de secreto, con lo bien que se cultivan los secretos en el país que iba a ser de la transparencia. Pero no voy a ponerme nostálgico. Lo bueno que tiene esta historia, vuestra historia, papeles perdidos de hoy, es que sois una pérdida transversal: afectáis a todos los grupos con poder. Y lo que son las nuevas tecnologías: apareceréis los que, como vuestro nombre indica, estabais en papel. Os habéis evaporado los escritos en 'Telegram'. Y yo me refugio un día más en Machado: “Y te daré mi canción; / se canta lo que se pierde / con un papagayo verde / que la diga en un balcón”.