Las redes sociales son una gran plataforma para comunicar historias pero no siempre tienen que ser anécdotas absurdas o tristes. La última historia que está revolucionando la red es la de Kenny, un joven que trabaja en un local de comida rápida que realizó un pequeño gesto mientras trabajaba que ha significado mucho para el resto de personas.
A través de Facebook, una mujer estadounidense decidió hacer público lo que estaba presentado en un restaurante mientras almorzaba. Según cuenta ella, se encontraba en la cola cuando entró por la puerta un hombre discapacitado al que nadie podía entender. Por su dificultad en el habla, el hombre llevaba un cartel en el que solicitaba ayuda. Al comprender el cartel, un dependiente decidió salir del mostrador y echarle una mano. Era Kenny, quien decidió pedirle un menú y llevárselo a la mesa. Pero Kenny sabía que eso no era suficiente, por lo que dejó unos minutos su puesto de trabajo para cortarle la comida y ayudarle a comer. Un pequeño gesto que ha ayudado enormemente a alguien y, es que, a veces, no somos conscientes de todo lo que tenemos a nuestro alcance para hacer de este un mundo mejor.