La cabalgata ha transcurrido por las calles de la población sobre un recorrido de algo más de un kilómetro entre el paseo de la Generalitat y la Plaza Mayor, donde se han congregado miles de personas para que los niños recibieran a los Reyes Magos de Oriente.
En la comitiva que ha acompañado el paso de los reyes Melchor, Gaspar y Baltasar han participado más de 800 personas y doce carrozas, se han quemado unas 4 toneladas de teas de pino y se han repartido 1.500 kilos de caramelos.
En la cabalgata se han exhibido muchos farolillos independentistas que portaban niños y padres, pero estos no han predominado sobre los farolillos multicolores tradicionales.
La exhibición de estos farolillos con la bandera estelada es un gesto que se viene repitiendo en los últimos años en la Cabalgata de Vic, pero que en esta edición ha suscitado una mayor polémica por el efecto de la retransmisión por parte de TV3, que cada año escoge la de un municipio.
La polémica surgió a principios de esta semana tras conocerse que la Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural -que finalmente se ha desmarcado- iniciaron una campaña para animar a la población a recibir a los Reyes Magos con "farolillos de la estelada" en esta cabalgata, lo que ha generado críticas tanto de la oposición como de la Delegación del Gobierno en Cataluña y entidades como Societat Civil Catalana.