Trump mantiene a Romney como uno de los candidatos a ocupar la Secretaría de Estado
El presidente electo de EEUU, Donald Trump, anticipó que la semana próxima espera resolver el misterio sobre la persona que ha elegido para la Secretaría de Estado y confirmó que mantiene entre los candidatos a Mitt Romney.
El cargo de jefe de la diplomacia de EEUU es el nombramiento más importante que le queda por cubrir a Trump, después de haberse definido por las personas que se encargarán de carteras como Defensa o el Tesoro. Romney, que fue candidato presidencial republicano en los comicios de 2012, ha sido una de las figuras más mencionada, incluso por Trump, desde que comenzaron a surgir nombres de los aspirantes a ocupar la Secretaría de Estado.
Durante la campaña electoral para las elecciones del 8 de noviembre pasado, Romney trabajó activamente contra Trump y ambos intercambiaron insultos, pero desde entonces las heridas parecen cerradas, y de hecho ambos se han reunido ya en dos ocasiones. "No es tiempo de venganzas, sino de lo que es bueno para el país", afirmó Trump en una entrevista telefónica con la cadena NBC. "He podido superar estas cosas (...). Yo también le di duro" a Romney, agregó el gobernante electo. Romney figura en una lista privilegiada de media docena de personas candidatas para ese puesto y que incluye, entre otros, al exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani, al exembajador de EEUU ante la ONU John Bolton y al general David Petraeus.
En la entrevista, Trump sumó a los candidatos a Rex Tillerson, máximo directivo de la petrolera ExxonMobil, la más importante del país, y con quien se reunió este martes. "Ha forjado una tremenda compañía", agregó Trump.
El magnate neoyorquino dijo que está "muy cerca" de tomar una decisión sobre quién será su secretario de Estado. "Creo que la semana que viene será cuando lo anuncie", agregó, sin dar mayores pistas.
Trump hizo sus declaraciones un día después de que confirmara al general retirado James Mattis para la cartera de Defensa, aunque ya había anticipado esa elección la semana pasada. Este miércoles se informó oficialmente de que Trump ha escogido al gobernador de Iowa, Terry Branstad, para representar a Estados Unidos ante el Gobierno de Pekín, un puesto clave en el futuro esquema diplomático de la Administración Trump. Branstad "tiene un montón de experiencia en temas comerciales" y un "tremendo conocimiento de China y del pueblo chino", afirmó un portavoz del equipo de transición presidencial, Jason Miller, al dar cuenta de este nombramiento.
Trump llegará a la Casa Blanca, el 20 de enero, con unos antecedentes incómodos para la relación con China después de confirmarse el viernes pasado que había hablado por teléfono con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen. Esa llamada, que el equipo de Trump insiste que fue "de cortesía", para felicitarlo por su triunfo electoral, rompió una política oficial de cuatro décadas de parte de EEUU en cuanto a la ausencia de contactos con el Gobierno de Taipei. Estados Unidos no reconoce a Taiwán, por lo que la llamada telefónica entre Trump y Tsai generó una protesta formal del Gobierno de Pekín, lo que se suma a las críticas que ha venido haciendo Trump sobre la influencia china en el comercio mundial.
En su entrevista telefónica con la cadena NBC, el presidente electo anunció que en los próximos días se darán a conocer otros nombramientos de su equipo, aunque no precisó en qué carteras. Distintos medios de comunicación coincidieron hoy en que la persona que se encargará de Seguridad Nacional será el general retirado John Kelly, exjefe del Comando Sur y un experto en relaciones de seguridad con Latinoamérica. De confirmarse oficialmente la elección de Kelly, su nombramiento tendrá que ser ratificado por el Senado.