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La iniciativa fue respaldada por 328 diputados, todos ellos del partido oficialista Rusia Unida (RU), una de las cuatro formaciones representadas en la Cámara Baja del Parlamento ruso. Los legisladores de los otros tres grupos parlamentarios -del Partido Comunista, el Partido Liberal Democrático y Rusia Justa- se pronunciaron contra el proyecto, pero reunieron solo 104 votos.
Ocho miembros del grupo parlamentario de RU no participaron en la votación y uno de ellos, la diputada por Crimea Natalia Poklónskaya, votó en contra del proyecto, que ha suscitado un rechazo generalizado de la población. Según el Gobierno, el incremento de la edad de jubilación está dictado por la necesidad de adecuarse a las realidades demográficas del país y de elevar el monto de las pensiones.
La expectativa de vida en Rusia es de 67 años para los hombres y de 77 para las mujeres, según datos del Banco Mundial del año 2016. El proyecto, que contempla el incremento paulatino de la edad de jubilación a partir de 2019, de un año cada año, ha sido recibido de uñas por los futuros pensionistas.
"Diputados, el 90 por ciento de los ciudadanos rechaza la ley. ¿De qué contrato social se puede hablar aquí? No tenemos derecho moral, económico ni social para votar a favor de la ley", dijo Serguéi Mirónov, el líder de Rusia Justa, al argumentar la postura de su formación.
Uno de los líderes de la oposición extraparlamentaria, Alexéi Navalni, tachó de "enemigos de pueblo" a los diputados que respaldaron el aumento de la edad de jubilación. "La Duma ha aprobado una ley por la que decenas de millones de
ciudadanos de Rusia serán despojados de decenas de miles de rublos", dijo Navalni.
De acuerdo con el procedimiento legislativo, el proyecto puede sufrir algunas enmiendas en su lectura definitiva, pero es sumamente improbable debido al apoyo cerrado de la formación oficialista, que cuenta con una mayoría de más de dos tercios en la Duma.