Obama alerta al Congreso de que el rechazo del acuerdo con Irán llevará a otra guerra
El presidente de EEUU, Barack Obama, alertó hoy al Congreso de que rechazar el acuerdo nuclear con Irán sería el peor error desde la invasión de Irak y llevaría a "otra guerra" en Oriente Medio, al subrayar una vez más su preferencia por la misma diplomacia que permitió poner fin a la Guerra Fría.
Obama ofreció desde la American University de Washington su discurso más elaborado y extenso -de unos 45 minutos- hasta la fecha sobre el pacto nuclear sellado con Irán en julio, dos días antes de irse de vacaciones y en el marco de su campaña para tratar de convencer al Congreso de que avale el pacto cuando lo someta a voto a mediados de septiembre.
La elección de la American University no fue casual, ya que Obama evocó en su alocución al asesinado presidente John F. Kennedy y su discurso de junio de 1963 en ese mismo lugar, donde llamó a una "paz práctica" en plena Guerra Fría, cuando "la perspectiva de una guerra nuclear era muy real".
Así, en su discurso Obama enalteció de principio a fin el arte de la diplomacia frente a la guerra y la política de acercamiento a los "enemigos" de EEUU, que también está ejecutando con Cuba.
"El rechazo del Congreso a este acuerdo (nuclear) deja a cualquier Administración estadounidense que esté absolutamente comprometida con evitar que Irán obtenga un arma nuclear con una sola opción, la de otra guerra en Oriente Medio", advirtió el presidente.
La elección "que enfrentamos es, en última instancia, entre la diplomacia y alguna forma de guerra. Quizá no mañana o dentro de tres meses, pero pronto", agregó.
Asimismo, según Obama, el debate que tiene ante sí el Congreso de EEUU acerca del acuerdo nuclear con Irán es el más importante sobre una cuestión de política exterior desde la autorización de la guerra de Irak en 2002.
Muchos de los legisladores que votaron en su día a favor de esa guerra se oponen ahora al acuerdo con Irán, porque "es fácil jugar con los miedos de los ciudadanos y magnificar las amenazas", remarcó Obama, cuya promesa de poner fin a la invasión de Irak fue clave para su primera victoria electoral en 2008.
Durante esa campaña electoral, "dije que Estados Unidos no solo tenía que poner fin a esa guerra, sino a la mentalidad que nos llevó a ella", caracterizada por primar "la acción unilateral" sobre "el trabajo minucioso de construir un consenso internacional" y por "exagerar las amenazas más allá de lo que apoya la inteligencia", recordó Obama.
"El pacto con Irán es el acuerdo de no proliferación más sólido jamás negociado", destacó Obama ante una audiencia de más de 200 personas.
Insistió en que el acuerdo, alcanzado el mes pasado en Viena entre Irán y el Grupo 5+1 (EEUU, Rusia, China, Reino Unido, Francia y Alemania), se basa en la "verificación", no en la confianza hacia Teherán, y que garantiza que la República Islámica no tendrá acceso al plutonio necesario para fabricar una bomba nuclear.
"Si el Congreso mata este acuerdo, perderemos más que las restricciones de ese pacto nuclear o las sanciones que hemos construido cuidadosamente. Perderemos algo más preciado: la credibilidad de Estados Unidos como líder de la diplomacia", argumentó el mandatario.
Para entrar en vigor, el acuerdo alcanzado en Viena el 14 de julio debe ser aprobado por el Congreso de EEUU, así como por los Parlamentos de los demás países firmantes del pacto.
Los legisladores solo podrían anular la participación de EEUU en el acuerdo si una mayoría de dos tercios en ambas Cámaras del Congreso vota en ese sentido, algo que invalidaría el veto que Obama ha prometido imponer a cualquier legislación contra el pacto.
Obama se ha involucrado de manera muy personal, dedicando tiempo y esfuerzos, en una campaña para tratar de vender las bondades del acuerdo a los congresistas y se ha reunido ya con unos 80 de ellos.
De acuerdo con Obama, el Gobierno israelí es el único del mundo que no ha respaldado públicamente el acuerdo nuclear con Irán.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha calificado el acuerdo de "error de proporciones históricas" y ha advertido de que Irán "verá el camino libre para desarrollar armas nucleares".
Hoy Obama dijo que está "preparado para conversar" sobre un aumento de la ayuda de defensa a Israel y se refirió a que ya está en marcha un diálogo "para concluir otro plan de diez años para la asistencia de seguridad estadounidense" a ese país.
El pacto entre el Grupo 5+1 e Irán prevé que Teherán limite su programa nuclear de forma que no pueda fabricar armas atómicas durante al menos diez años, a cambio de que la comunidad internacional levante las sanciones que lastran su economía.
Para ello, el Organismo Internacional de Energía Atómica, OIEA, debe certificar hasta finales del año que la República Islámica cumple con los compromisos adquiridos y ha acordado con Teherán un calendario de actividades de verificación.