Un montañero estadounidense decidió explorar la semana pasada el pico más alto de las Montañas Rocosas, en el estado de Colorado (EE.UU.). Se trataba del monte Elbert, de 4.401 metros de altura, que no requiere de gran habilidad para subir a su cima.
El hombre, que había salido por la mañana sobre las 9:00 horas, no dio señales de vida una vez llegada la hora en la que debería haber regresado de su aventura. Esto preocupó a sus familiares, quienes dieron aviso a la organización de rescate Lake County Search and Rescue en torno a las 20:00 horas.
El equipo de rescate comenzó su operación de búsqueda llamando primero a su teléfono para ver si conseguían contactar con él y poder averiguar su ubicación, pero el excursionista rechazó las numerosas llamadas. Ignoró, incluso, los mensajes de texto con los que siguieron insistiendo.
Fue entonces cuando el Lake County Search and Rescue organizó una batida de búsqueda para encontrarlo. Al menos ocho personas salieron a buscar al senderista perdido. Aunque cuál fue su sorpresa al hallarlo fácilmente en su punto de regreso.
El hombre se sorprendió al ver el despliegue orquestado para encontrarlo, ya que no tenía ni idea de que le estaban buscando. En cuando a las llamadas de rescate, reconoció no haber contestado al tratarse de un número desconocido.
El alpinista les contó que se había perdido al atardecer porque no encontraba el camino de vuelta y que se pasó la noche deambulando, hasta que al día siguiente consiguió regresar al lugar de alojamiento, donde fue localizado por el equipo de rescate.