Internacional

Irán exige a Suecia que acabe con su "hipocresía" tras permitir una nueva profanación del Corán

Hossein Amir Abdollahian, ministro de Exteriores iraní, ha expresado su malestar por la situación y exige que se juzgue y se condene a los culpables. Mientras, varios países islámicos se plantean convocar a sus respectivos diplomáticos suecos ante la gravedad de los hechos.

ondacero.es

Madrid | 21.07.2023 22:17

Hossein Amir-Abdollahian, ministro de Exteriores iraní, el pasado febrero durante un discurso en las Naciones Unidas. | Europa Press / Benoit Doppagne

Hossein Amir Abdollahian, ministro de Exteriores iraní, ha condenado la actitud de Suecia por autorizar una nueva profanación del Corán durante la última manifestación en Estocolmo (siendo en esta ocasión pisoteado, aunque no quemado), pidiendo al país escandinavo que acabe con la "hipocresía" y la "propagación de la violencia".

De acuerdo con la agencia de noticias iraní IRNA, Abdollahian llamó por teléfono a su homólogo sueco, Tobias Billström, para insistirle en que "la profanación del sagrado Corán y de otros libros celestiales se condena enérgicamente", y que repetir este tipo de actuaciones amparándose en la libertad de expresión es inaceptable y no tiene justificación posible.

Según el ministro: "Suecia afirma ser pionera en el campo de los derechos humanos. Entonces, ¿cómo puede ignorar la decisión del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que condenó la ofensa de las santidades religiosas en menos de diez días?".

Abdollahian reitera la necesidad de que el país escandinavo ponga fin "a este tipo de hipocresía", que trae consigo unas repercusiones devastadoras, e insistió en que se arreste y juzgue a los implicados en el delito. "De lo contrario, Suecia debe esperar las decisiones de los países islámicos", sentenció.

Irán, liderada por la rama chiita, convocó hoy al embajador sueco en Teherán, Matthias Lent, para transmitirle su enérgica condena "por esta acción vergonzosa". Además, un grupo de iraníes se ha manifestado hoy frente a la embajada sueca en la capital del país, para exigir la expulsión inmediata del embajador de Suecia en la República Islámica.

Abdollahian telefoneó anoche a su homólogo iraquí, Husein Fuad, tras la decisión ayer en Bagdad de retirar a su encargado de negocios en Suecia, y de expulsar a la embajadora sueca en Irak, Jessica Svärdström.

Numerosas organizaciones y países islámicos, incluidos Arabia Saudí, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Catar, han condenado también a las autoridades suecas por permitir la profanación, calificando estos hechos de "irresponsables y provocativos". Algunos de estos países incluso han anunciado que convocarán en los próximos días a sus respectivos diplomáticos suecos, para transmitirles su malestar.