Yolanda Díaz continúa esbozando su futuro político. La vicepresidenta segunda del Gobierno ha anunciado este jueves que comenzará a trabajar en él en cuanto cierre las negociaciones de la reforma laboral y que pretende que ese proyecto trascienda al electorado actual de Unidas Podemos.
Así lo anunció este jueves la propia Díaz en una entrevista en el programa La Cafetera de Radiocable, donde también aseguró que quiere evitar quedar relegada a la "esquinita" que supone en el imaginario colectivo la izquierda "a la izquierda del PSOE". "Lo que me seduce es pensar un país en grande" donde quepan "prácticamente todos" y demostrar, desde posiciones aglutinantes, que España tiene "enorme potencialidad para ser mejorada y cambiada".
"Este debate, este presunto regalo que nos quisieron hacer. Fíjese en la extrema izquierda, no la quiero, nunca he trabajado así, con fetichismos ideológicos, y no lo voy a hacer", ha ahondado la también ministra de Trabajo para citar el caso de la sanidad pública, una materia que no es "ni de izquierdas ni de derechas, sino de la ciudadanía española".
Bajo esta perspectiva, Díaz ha enfatizado que poner "etiquetas" ideológicas no es positivo y ha defendido la construcción de proyectos de unidad desde las "posiciones concretas", donde "muchos" se pueden encontrar en un proyecto "más allá" de las propias convicciones.
De esta forma, ha subrayado que el "reto apasionante" y donde quiere estar la vicepresidenta es en tejer un proyecto de mayorías sociales, con protagonismo de la ciudadanía, donde prime el diálogo, y que despierte "entusiasmo" para imaginar un futuro mejor.