Toni Cantó estalla contra Gonzalo Miró por los incidentes de Paiporta: "¿Y dónde estaban las juventudes de Podemos?"

Toni Cantó y Gonzalo Miró protagonizaron un intercambio lleno de tensión sobre los recientes incidentes en Paiporta, en los que Pedro Sánchez recibió un golpe en la espalda, mientras que el rey y Mazón aguantaron la frustración y la ira de muchos de los allí presentes. Miró señalaba la presencia de grupos de ultraderecha como responsables de los altercados, a lo que Cantó respondió con firmeza.

La conversación comenzó cuando Miró intentó aportar contexto, destacando que varios medios informaban de la intervención de grupos de ultraderecha en Paiporta. "Negar eso... es simplemente negar la realidad", afirmó Miró, apuntando a que los ataques hacia los líderes presentes no solo provenían de ciudadanos indignados, sino también de sectores extremistas. Cantó, claramente molesto, contestó sin rodeos: "Gonzalo, yo estaba ahí, y te aseguro que no había ningún elemento de ultraderecha ni ninguna mierda de estas que se están vendiendo ya desde el Gobierno".

Para Cantó, los verdaderos culpables de la situación no eran los manifestantes, sino una gestión "brutalmente ineficaz" que dejó a los ciudadanos desprotegidos frente a la emergencia. El exparlamentario reprochó que se culpe a los vecinos que asistieron de forma voluntaria para ayudar en las labores de recuperación."Yo vi a ciudadanos de a pie echando una mano, ¡¿Dónde estaban las juventudes de Podemos?! Esa gente que tanto defiende la voz del pueblo no estaba allí", señalaba Cantó.

Además, Cantó defendió al Rey Felipe VI, quien, en su opinión, demostró valor al enfrentarse a la situación directamente y escuchar a la ciudadanía: "Para eso hay que tener lo que hay que tener y ser un hombre de verdad". Por otro lado, criticó al presidente Sánchez, quien, según él, "salió corriendo por patas", lo que dejó, en su opinión, un mensaje de debilidad en un momento en el que se requería fortaleza institucional.

"Es muy difícil poner razón cuando se está hablando desde la pasión y desde las entrañas", le espetaba Miró. Sin embargo, Cantó mantuvo su postura, subrayando que no se debía desacreditar a quienes estaban allí ayudando. Argumentó que incluso si algunos individuos eran de ideologías de derecha, ellos fueron quienes aportaron recursos y esfuerzo a la comunidad afectada: "¡Chapó a esa gente! Están llevando trailers de ayuda mientras las administraciones se escudan tras burocracia inútil".

En cuanto al aspecto técnico del desastre, Cantó también arremetió contra la Confederación Hidrográfica del Júcar, a la que acusó de una gestión desastrosa, basada en avisos poco efectivos mediante correos electrónicos en lugar de alertas activas y eficaces. "¿En manos de qué burócratas de mierda estamos?", expresó con indignación, refiriéndose a los avisos enviados a la población sobre el aumento del caudal de agua, que no fueron suficientes para prevenir daños.

Miró le recordó a Cantó que las competencias de la gestión del desastre recaen en el ámbito autonómico de la Comunidad Valenciana y que, por lo tanto, las críticas debían dirigirse también a las autoridades locales.