Ha puesto en valor el compañerísmo en la cárcel

Sánchez Cogedor, el español encarcelado en Irán durante 15 meses llega a España: "Ha sido muy duro"

Santiago Sánchez Cogedor fue liberado hace unos días y ya ha vuelto a Madrid después de pasar 15 meses encarcelado en Irán.

EFE

Madrid |

El español preso en Irán durante 15 meses, Sánchez Cogedor | EFE

El español Santiago Sánchez Cogedor ha aterrizado en el aeropuerto madrileño de Barajas después de haber sido liberado en Irán, donde ha estado encarcelado desde octubre de 2022 tras visitar la tumba de Mahsa Amini: "ha sido muy largo y muy duro, no sabemos lo afortunados que somos por haber nacido en este país".

Con estas palabras, Sánchez Cogedor ha trasladado a la avalancha de medios de comunicación que le esperaba en el aeropuerto sus primeras impresiones tras haber pasado casi 15 meses en la cárcel de Evin, una de las más duras del país, después de haber fotografiado y visitado la tumba de Mahsa Amini, cuya muerte por llevar mal colocado el velo dio lugar a protestas en todo el país y en todo el mundo.

El madrileño, de 41 años, ha leído ante las cámaras el texto de un "diploma" que le entregaron a modo de despedida los presos de la cárcel y ha recordado que la pena que espera en Irán a un acusado de espionaje es una "sentencia de muerte".

Emocionado y en presencia de su familia, Sánchez Cogedor ha puesto en valor el compañerismo que encontró en prisión con el resto de reclusos, que en el "diploma" le han agradecido su liderazgo, que ha llenado "de esperanza toda la prisión" y que aprobase "con su fuerza interior", el examen de la paciencia y la soledad.

Sánchez Cogedor ha explicado que el "diploma" le fue entregado por el preso más antiguo de la cárcel de Evin (17 años en prisión) que le ha asegurado que el "pueblo iraní le quiere".

Cogedor seguirá caminando, el próximo objetivo: África

Preguntado por el futuro de su hijo ya en España, Celia ha señalado que pese a esta traumática experiencia, "piensa seguir caminando", para "desgracia" de su madre, y el próximo objetivo que tiene en mente es África.

Celia ha sugerido que su hijo fue "traicionado" para entrar en Irán y hacerse una foto en la tumba de Mahsa Amini, pero también ha dicho que Santiago no desea mal a nadie, y tampoco a quien le llevó allí.

Preguntada por supuesto maltrato o torturas en la cárcel, Celia no ha querido entrar en ese asunto porque es algo que le "derrumbaría".

Ha reconocido que los peores momentos fueron el primer mes, pero ha dejado claro que se siente "muy orgullosa de su hijo" por su empatía con la gente, y por el carácter que demostró en la cárcel con sus compañeros reclusos. "Le encanta hacer el bien", y prueba de ello es que "quinientos presos le mantearon como despedida".