Puig, en una comparecencia ante los medios en el Palau de la Generalitat, ha hecho sus primeras declaraciones tras firmar su carta de denuncia como miembro de la ejecutiva federal del PSOE para forzar la salida de Sánchez como secretario general del partido.
Tras un acto para reivindicar una mejora en la financiación autonómica, el dirigente valenciano ha reconocido su dimisión de la ejecutiva federal y ha apuntado que, "de facto", él ya había dimitido "tras lo que pasó en las últimas elecciones" y haberse sentido "desautorizado" por Sánchez cuando planteó, sin éxito, un acuerdo con Compromís y Podemos para concurrir juntos al Senado.
Desde entonces, ha declarado, no ha vuelto a acudir a la ejecutiva porque sentía que su propuesta era "absolutamente coherente" y partía de la base de la mayoría social de la Comunitat Valenciana.
"No hice nada que pudiera perjudicar al PSOE, pero lo que ha pasado en las últimas horas ya es definitivo; yo no me siento concernido por la actual ejecutiva. No sé lo que va a hacer Sánchez, habrá que preguntárselo a él, pero, si la mayoría de la ejecutiva no estuviese conmigo, yo no estaría" al frente de la misma, ha señalado.