La ministra portavoz, Pilar Alegría, ha confirmado que el Gobierno quiere presentar unos nuevos presupuestos al Congreso "en tiempo y forma", es decir, antes del 1 de octubre, a pesar de la incertidumbre por la falta de apoyos que puedan tener las cuentas públicas, especialmente desde el independentismo catalán.
En la rueda de prensa posterior al primer Consejo de Ministros celebrado tras el período estival, Alegría ha ratificado que el Ejecutivo cumplirá con su "responsabilidad" al llevar a la Cámara Baja su proyecto presupuestario para el próximo año. Después, será competencia de los grupos parlamentarios actuar como corresponda.
La ministra ha resaltado que, por parte del Gobierno, habrá "mano tendida" a la hora de ejercer esa responsabilidad de presentar las cuentas públicas. Algo que no pudo hacer en el ejercicio actual, lo que obligó a prorrogar los presupuestos anteriores, debido a que, según ha indicado, fue imposible en un año plagado de citas electorales.
Aunque no ha aclarado cuál sería la fecha de registro la Constitución establece en su artículo 134 que deberán presentarse "al menos tres meses antes de la expiración de los del año anterior", sí ha puesto énfasis en su voluntad de hacerlo. "Todavía estamos en tiempo y forma", ha recalcado Pilar Alegría al constatar que la "intención" y "tarea" del Ejecutivo es presentar el nuevo proyecto presupuestario, para apostillar: "Nos queda aún septiembre".
Tampoco ha especificado cómo solventará el obstáculo de la aprobación del techo de gasto, que fue rechazado el pasado mes de julio con el voto en contra de Junts y que resulta un paso previo imprescindible para tramitar las cuentas públicas. No obstante, ha manifestado que deberían ser acordes "con la buena marcha de la economía".
Sobre las dificultades que pueda seguir planteando Junts, fuentes del Gobierno han señalado que su intención es seguir dialogando con normalidad con los independentistas, cuya posición interpretan en clave del proceso congresual en el que se encuentra inmerso el partido de Carles Puigdemont.
Respecto a la posibilidad de que finalmente no quede más remedio que aceptar una nueva prórroga de los presupuestos, señalan que ello supondría extender unas cuentas propias, no del PP, y además con carácter expansivo.