"Otra vez, Manos Limpias, de nuevo Manos Limpias, que es lo mismo que decir que otra vez estamos delante de una denuncia falsa construida otra vez a través de recortes y retazos de tabloides digitales", ha dicho ña ministra portavoz, Pilar Alegría, acusando a la organización de basar su denuncia al hermano del jefe del Gobierno en información "falsa" y bulos.
La ministra ha destacado "la desconfianza que genera este grupo ultraderechista" incluso en la propia jueza, que ha tenido que pedir a Manos Limpias que "formalice los trámites procesales" y pague "una fianza de 10.000 euros" para seguir adelante con la denuncia. Este punto es el del patinazo de Alegría al referirse a esa fianza.
Ahí es dónde ha caído en un error ya que el Artículo 280 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal dice que "el particular querellante prestará fianza de la clase y en la cuantía que fijare el Juez o Tribunal para responder de las resultas del juicio". Por tanto, siempre sucede así independientemente de quién denuncie y así se lo han recordado:
"La ministra portavoz debería saber que el art. 280 LECRIM establece que siempre hay que exigir fianza a la acusación popular, y que eso no depende de que genere o no desconfianza", ha escrito el prestigioso abogado penalista José María de Pablo.
Las declaraciones del Gobierno tienen lugar tras la imputación de la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, a raíz de una denuncia de Manos Limpias, y un día después de que el Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz haya abierto diligencias de investigación contra David Sánchez, el hermano del presidente del Gobierno, así como contra el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, y el responsable de Recursos Humanos de esta institución.