Como consecuencia, en parte, de los acuerdos logrados el pasado año 2023, y dado que la práctica totalidad de los mismos son de carácter plurianual, la situación de la negociación colectiva en Euskadi a 31 de mayo de 2024 es la mejor de los últimos años, con el 58,3% de la población trabajadora , el porcentaje más alto desde la entrada en vigor de la reforma laboral de 2012, con sus convenios actualizados y sólo el 4,6% con sus convenios decaídos. Datos aportados en la presentación de su informe “Situación Económica y Relaciones Laborales en la CAPV 2023”, disponible para su consulta en la web del Consejo www.crl-lhk.eus.
Y es que, los acuerdos logrados por los agentes sociales, tanto en 2023 como en estos primeros meses de 2024, han permitido la recuperación de algunos convenios decaídos, así como aumentar nuestros propios ámbitos de negociación. De esta forma, en los cinco primeros meses de 2024 se han rubricado convenios que dan cobertura a 41.494 personas, entre los que cabe destacar en el ámbito sectorial de la CAPV por su nivel de empleo el de las Concesionarias de Limpieza de Osakidetza, con una población trabajadora de casi 2.600 personas, y en Gipuzkoa, el de Limpieza Viaria y el de Intervención Social que, en conjunto, dan cobertura a casi 3.000 personas. Respecto a la situación de los convenios decaídos, señalar que en 2023 se recuperó el convenio de Restauración de Gipuzkoa, y en 2024 el de Comercio del Calzado y Piel de Bizkaia, que se ha integrado en el del Comercio en General de ese territorio, y el de Alimentación de Álava. En cuanto al incremento salarial medio contemplado en los convenios en vigor a 31 de mayo de 2024, es del 3,38%, con la siguiente distribución: 3,61% en los negociados en la CAPV y del 2,84% en los de ámbito estatal con incidencia en la CAPV.
La jornada media aplicable en 2023, teniendo en cuenta, tanto los convenios vigentes como los que se encuentran en situación de prórroga, se situaría en casi 1.684 horas, equivalentes a unas 37 horas semanales, con ligeras diferencias sectoriales. En la industria y la construcción la jornada semanal se situaría en torno a las 37,5 horas, mientras que en el sector servicios se situaría ligeramente por debajo de las 37 horas. En un contexto de un hipotético cambio normativo, en el que la jornada máxima anual pasase de las 40 horas semanales a las 37,5 horas, los datos recogidos por el CRL indican que unas 250.217 personas tendrían pactada en sus convenios una jornada semanal por encima de las 37,5 horas (1.712 horas anuales), lo que supone que aproximadamente el 43,5% de las personas con su convenio en vigor o prorrogado verían su jornada anual reducida en 43 horas de media.