Según dicen algunas personas, al igual que el "juego del ganso", este juego proviene de Europa y se extendió en nuestros pueblos durante el siglo XVIII. Pero hay quien dice que estos juegos existieron aquí anteriormente. De todas formas, el juego del gallo que durante los siglos XVIII y XIX no faltaba en ninguna fiesta, casi ha desaparecido de las plazas. Legazpi es uno de los pocos municipios que mantiene la tradición. 20 euros para la persona que lo logre. Antiguamente, la participante o el participante que llegaba donde el gallo, le tenía que cortar el cuello con una espada, y sería el gallo la recompensa que se llevaría a casa. Hoy en día, no se hace nada parecido. Cuando la persona participante llegue a la posición del gallo, tiene que realizar un círculo con la espada e intentar que el gallo quede dentro del círculo descrito. Y el premio tampoco será el gallo, sino 20 €. Pero sí existe una característica que se ha mantenido en los tiempos: los txistularis siempre han acompañado con la melodía "Tranka-tranka", también hoy en día, que lo interpretan solo en dicho juego.