Pamplona/Iruña |
La Asociación de Víctimas de Abusos de Navarra y AVIPIREN, la Asociación de víctimas de pederastia en Instituciones Religiosas de Navarra, tachan de "indignante" la actitud de la Conferencia Episcopal Española por no dar "credibilidad" a las denuncias y " abusos gravísimos" por parte de miembros de la Iglesia. Censuran "el engaño sufrido" por parte de la Conferencia Episcopal Española y recuerdan que el anterior presidente de la CEE, Juan José Omella, encargó un informe al despacho Cremades-Calvo Sotelo y el resultado fueron unas 2.000 víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica que la Conferencia Episcopal no aceptó.
Tras desestimar el propio informe que habían solicitado, sostienen ambas asociaciones, la propia Conferencia Episcopal elaboró otro informe cuyo contenido se ha hecho público en los últimos días. En él se reduce el número de víctimas "de manera considerable basándose en criterios propios", en cuanto a "la veracidad o no de las denuncias de las víctimas". Tanto la Asociación de Víctimas de Abusos de Navarra como AVIPIREN, la Asociación de víctimas de pederastia en Instituciones, denuncian que esta actitud conlleva "volver a ser revictimizados de una manera cruel, dejándonos de mentirosos y dudando de lo que hemos sufrido". Por este motivo exigen que se "aclare todo lo sucedido" y se les "incluya en ese informe" como lo que son, víctimas de abusos sexuales de la Iglesia Católica.