Programa Especial

La Familia Cirsus: vino, aceite, gastronomía y mucho más

Programa especial de Más de Uno Pamplona, con Marisa Lacabe y Aitor Plaza, para conocer la oferta transversal de Pago de Cirsus. Vino, gastronomía, aceite y alojamiento se unen en una experiencia para regalar, disfrutar y recordar.

Onda Cero Navarra

Pamplona/Iruña |

Pago de Cirsus es mucho más que una bodega” podría ser perfectamente un claim comercial, pero no lo es. Es una descripción de la realidad que gira alrededor de esta familia, la Familia Cirsus. En Onda Cero Navarra visitamos las instalaciones en Ablitas, donde se cultiva la uva, se recoge y trata hasta convertirla en vino de Pago, y en las que el visitante puede descansar en su hotel boutique, contemplando la inmensidad del Moncayo y los viñedos, y donde puede disfrutar de una gastronomía que lleva la firma y garantía del director gastronómico Pedro Larumbe.

En el año 2014, Alejandro Gómez Sigala; su mujer, Letizia Mangione; y su hijo, Alejandro Alberto desarrollaron un proyecto profesional con el objetivo de construir un legado que va camino de ser referencia. La Familia Cirsus y todo lo que rodea a su marca no es fruto de un día, sino de años de paciencia, de planes a largo plazo y de adaptación en procesos para elevar la calidad de los vinos hasta convertirse en el orgullo que son hoy en día.

Un paragüas que abriga a los vinos de Pago de Cirsus, Bodegas Zifar, Bodegas Irache y los aceites de Hacienda Queiles, una producción de AOVE en cuarenta y dos hectáreas que también lleva la denominación de Pago. Y, ¿qué es un vino o aceite de Pago? En Más de Uno Pamplona, el director comercial, Javier Zangróniz explica que “en España hay cerca de veintiséis vinos de pago, una denominación protegida que lleva el nombre de la finca, la Finca Bolandín en este caso”. Los vinos que se elaboran son de estos mismos terrenos, y en el caso de Pago de Cirsus, "trabajamos con siete variedades de uva diferente”, relata Zangróniz. “Será la única bodega de España que dedica todos su viñedos a hacer este vino de Pago”.

Pago es una denominación de origen protegida que “debe cumplir una serie de requisitos marcados por la Unión Europea y el Ministerio de Agricultura”, relata la directora de marketing, Naudii Romero. “Bodega y viñedo tienen que ser del mismo propietario, la bodega debe haber estado un mínimo diez años en una denominación de origen, solo se pueden hacer vinos con las uvas de tu finca y debes tener alguna característica diferenciadora que puedas comprobar”, detalla Romero.

En el caso de los vinos de Pago de Cirsus cuentan con unas condiciones climáticas que hacen inigualable el cultivo de la vid. A la uva le influye “la cercanía del Moncayo, la humedad del río Ebro y la entrada del cierzo” que da unas diferencias de temperaturas grandes entre la noche y el día que “son clave para las características de las uvas”.

Dentro del grupo, además, está Bodegas Irache, en Ayegui, una de las primeras bodegas con la certificación del vino de Pago, con su Prado de Irache, que logra su elixir a partir de las diecisiete hectáreas de terreno en propiedad. Lo cual da a la Familia Cirsus la propiedad de dos de los veintiséis vinos de Pago de España.

El caso de los aceites es similar y con la Hacienda Queiles, su “oro líquido”, también es de Pago. Un elemento importante para el chef, Pedro Larumbe, que reconoce que “contar con estos aceites, disponer de productos especiales es una ventaja para nosotros”. El Premio Nacional de Gastronomía, con más de 50 años a sus espaldas en el mundo de la restauración, sabe bien de lo que habla, tanto es así que explica que “hacer un pil pil con el aceite Alhema de Hacienda Queiles da una sensación diferente”. Reconoce Larumbe que “lo ves en el color, en la textura, en la forma en la que liga, se nota en todo”, un AVOE que es un coupage de variedad Arróniz y Arbequina que tiene “enamorado” al director gastronómico. Un Pedro Larumbe que ha elaborado una serie de experiencias culinarias en forma de “menú”: Sensaciones de cuatro etapas, Sabores de seis etapas y Sentidos de ocho etapas, para que ir a comer o cenar sea más que eso, sea un disfrute total.

Pero la Familia Cirsus no se queda en vinos, aceite y gastronomía, sino que incluye una experiencia redonda con su hotel boutique, un emplazamiento dentro de la propia bodega que permite vivir el vino de primera mano y disfrutar de la naturaleza propia del sector. En Más de Uno Pamplona, se reconoce esta propuesta como “una buena idea para que Olentzero, Papá Nöel o Reyes Magos tomen nota” para las próximas Navidades.