Investigadores de la Universidad de Santiago descubren nuevas terapias contra el cáncer de tiroides más agresivo
La investigación científica identifica un agente terapéutico que elimina de forma selectiva las células cancerosas
Santiago de Compostela |
Investigadores del CiMUS de la Universidade de Santiago de Compostelahan descubierto una nueva terapia dirigida contra el cáncer anaplásico de tiroides, el más agresivo, que no daña células sanas al eliminar de forma selectiva las cancerosas.
Este tipo de cáncer, uno de los más agresivos y devastadores, actualmente ofrece muy pocas opciones de tratamiento efectivas, con una tasa de supervivencia de cinco años de apenas el 5%, pero este nuevo estudio abre la puerta a una terapia innovadora.
La investigación ha sido realizada por personal investigador del Centro de Investigación en Medicina Molecular (CIMUS) y del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago ambos pertenecientes a la USC y al Instituto de Investigación Sanitaria Galicia (IDIS), dirigidos por Clara Álvarez y José Cameselle.
El estudio, publicado en la revista Nature Communications, identifica un agente terapéutico, PIAS2b-dsRNAi, que elimina selectivamente las células cancerosas anaplásicas de tiroides sin afectar a las células sanas o a otros tipos de cáncer de tiroides de tipo benigno.
"Este hallazgo representa un avance significativo en la lucha contra esta enfermedad tan desafiante", ha apuntado Clara Álvarez, que señala que supone un enfoque totalmente novedoso para tratar el cáncer anaplásido de tiroides.
El uso de PIAS2b-dsRNAi se basa en identificar que una de las diferencias entre el cáncer anaplásico y las células normales, que a su vez es esencial para su proliferación, podría ser utilizada como su talón de Aquiles, comenta José Manuel Cameselle.
El personal investigador descubrió que una enzima llamada PIAS2b desempeña un papel crucial en la supervivencia de las células anaplásicas de tiroides. A diferencia de las células normales o de otros tipos de cáncer, las anaplásicas dependen de PIAS2b para su división. Este descubrimiento brindó la oportunidad de diseñar una terapia dirigida que atacase específicamente esta enzima clave.