El sindicato CNT pide la dimisión de la consejera de Salud y Servicios Sociales

El sindicato CNT Extremadura sostiene firmemente que el asesinato de Belén, educadora social, no se debe a un accidente fortuito, sino que es el resultado de una negligencia por parte de la Junta de Extremadura, por lo que debería dimitir la consejera. Esta organización denuncia la inacción del gobierno regional y afirma que es inaceptable que la Junta intente desentenderse de sus responsabilidades, cuando tenía pleno conocimiento de que los educadores sociales se encuentran desamparados y sin la protección necesaria.

La CNT resalta que esta tragedia es consecuencia directa de la privatización de los servicios públicos, un proceso que ha dejado a los trabajadores en una situación de vulnerabilidad. No se puede jugar con las vidas de los empleados para eludir responsabilidades. En este sentido, el sindicato exige la anulación del contrato vigente con la asociación que gestiona los pisos tutelados donde se produjo el fatídico incidente.

Además, el sindicato critica la tendencia de algunos sectores a culpar a los menores o a sus madres por la situación, instando a la Junta a escuchar las voces del colectivo de educadores. CNT enfatiza que es vital que el gobierno adopte medidas efectivas para garantizar la seguridad y el bienestar de los trabajadores en el sector social, y urge a la Junta a actuar con responsabilidad y a evitar la evasión de sus obligaciones.

Por otro lado, invita a la ciudadanía y a la clase trabajadora a sumarse a la manifestación del próximo día 22 en protesta por la situación del sector de intervención social