La Guardia Civil imputó durante 2023 a diez personas en Extremadura por provocar incendios o desarrollar acciones imprudentes en este ámbito, mientras que durante este año se ha detenido ya a un ciudadano e imputado a otros dos por hechos similares.
Las administraciones y entidades implicadas han abordado este miércoles durante una reunión en la Delegación del Gobierno en Extremadura los medios disponibles y las medidas de prevención de incendios y de lucha contra estos episodios en la comunidad autónoma.
En el encuentro presidido por el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, se ha dado cita también el consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural, Ignacio Higuero, entre otros.
Durante 2023 se registraron en Extremadura un total de 328 conatos de incendios (menores a una hectárea) y 141 de mayor extensión, con un episodio de más de 500 hectáreas.
Estas cifras globales representan un descenso del 39 por ciento en relación al ejercicio anterior.
No obstante, la superficie forestal quemada en la región durante el pasado año fue de 12.208 hectáreas, un 9,6 por ciento más en relación a 2022.