Enfermería y Fisioterapia denuncian precariedad laboral y piden contratos estables para una atención de calidad

Enfermeras y fisioterapeutas de Atención Primaria se han concentrado este jueves a las puertas del centro de salud Sebastián Traba en Cáceres y en el de Valdepasillas en Badajoz, para protestar por la precariedad laboral del colectivo y los incumplimientos de las administraciones respecto al refuerzo de plantillas y contratos estables que puedan proporcionar una atención de calidad a los pacientes. Convocados por Satse y bajo el lema 'Salvemos la Atención Primaria', se han celebrado sendas concentraciones en protesta por el deterioro asistencial y laboral y para exigir soluciones a la situación de la sanidad en la región. El portavoz de Satse en la provincia de Cáceres, José Antonio García, ha señalado que el colectivo de enfermeras y fisioterapeutas "está harto de los incumplimientos de la administración", de los contratos en precario, y de tener hasta 2.500 pacientes por cupo en Atención Primaria, donde hay jóvenes, adultos y mayores con diversas patologías que hay que atender. "No podemos continuar así, ni que se denieguen los días libres, ni que a los compañeros jóvenes se les hagan contratos de un día o una semana y que se les dé de baja el viernes y se vuelva a contratar el lunes", ha subrayado en declaraciones a los medios a las puertas del centro de salud del barrio de Nuevo Cáceres. Entre las reivindicaciones está también la de una jubilación anticipada a los 60 sin pérdida económica, "como tienen otras profesiones", ha dicho García, que confía en que la reforma laboral pueda cambiar la situación de muchas enfermeras con contratos más estables.

"Las enfermeras y fisioterapeutas hemos sufrido mucho y hemos llegado a la extenuación en la pandemia, hemos puesto nuestra vida en riesgo e, incluso, la hemos dado, y la administración nos paga con el olvido y el abandono", se ha quejado García. En esta protesta de Satse, la primera de una serie de concentraciones que se llevarán a cabo en los próximos meses, las enfermeras han recibido el apoyo de algunos pacientes como Monserrat que sufre el "desbordamiento" de la Atención Primaria y, en ocasiones, opta por la automedicación hasta que consigue una consulta, con el peligro que ello conlleva.