Hoy venía pensando en... que no hay pros ni antis, solo valencianistas

Hoy venía pensando en… que hoy no hay pros ni antis, ni a favor ni en contra… solo valencianistas.

Un día como el de hoy donde el Valencia se juega un pase a unas semifinales de Copa del Rey y en Mestalla no existen ni las filias ni las fobias, no hay trincheras que valgan… solo el sentimiento… ese que nos mueve a todos los valencianistas… ese que a algunos nos inculcaron desde pequeños… ese que tiene más de cien años de historia… ese que nos ha hecho reír y llorar… ese que nos ha hecho felices y desdichados… hoy, a partir de las ocho de la tarde, solo existe el Valencia y el valencianismo.

Hoy da igual que el dueño del Valencia sea Peter Lim aquel que mantuvo durante cinco años en la presidencia al infame Anil Murthy. Hoy da igual que estemos a 26 de enero y no hayan llegado los refuerzos que tanto ha reclamado Gattuso. Hoy da igual que el equipo lleve dando tumbos en las últimas tres temporadas alejado de Europa. Hoy da igual que esté a tres puntos del descenso. Hoy, durante dos horas, lo que importa es que nuestros futbolistas sientan el calor de Mestalla, que los rivales padezcan la presión que supone jugar en ese estadio y que Mestalla vuelva a vivir una de sus noches mágicas.

Por los que estuvieron, como mi padre, y ya no están, por los que están y llevan sufriendo estos últimos años, por los que están por venir… por todos ellos. Por las lágrimas de Paris, Milán y la Cartuja, por las lágrimas de aquel fatídico descenso al infierno, por las de aquella final del agua pero también por aquella felicidad de la Rosaleda, o del Pizjuán o de Goteborg o de Mónaco o del Calderón o de Sevilla. Porque eso es el Valencia, nuestro Valencia. El que os necesita olvidando vuestras filias y vuestras fobias. El que queremos que hoy se meta… en las semifinales de Copa