Los regantes consideran que la reducción a 27 hm3 es un capricho del gobierno que matará el desarrollo del sureste español
El portavoz de los regantes, el ilicitano Ángel Urbina, afirma que "es una decisión extemporánea y lo que quieren es eliminar el trasvase y sustituirlo por desaladoras"
Elche | 28.07.2021 09:09
Consejo de Ministros ha dado luz verde al cambio en las reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura a petición del Ministerio para la Transición Ecológica para reducir en 11 hm³, de los actuales 38 hm³ a 27 hm³, el trasvase máximo mensual de agua en nivel 2 del Tajo al Levante. El proyecto 'Real Decreto por el que se modifica el Real Decreto 773/2014, de 12 de septiembre, por el que se aprueban diversas normas reguladoras de trasvase por el acueducto Tajo-Segura' contempla rebajar, siempre que existan condiciones hidrológicas excepcionales, los envíos de agua a la cuenca del Segura en el nivel 2, pasando de 38 hectómetros cúbicos a 27. De estos, el regadío se quedaría con 19,5 hm3 y perdería nueve, mientras que las aportaciones destinadas al consumo humano se quedarían en 7,5 hm3.
Esta medida supondrá, en base a la estadística del comportamiento de la reserva del agua en la cabecera del río, un recorte anual de entre 13 hm3 y 60 hm3 que son, estos últimos, los hectómetros cúbicos de agua que no hubieran venido en el último año, en el que durante cinco meses consecutivos el Ministerio para la Transición Ecológica ha trasvasado el caudal máximo mensual hasta este mismo mes de julio. Los técnicos ya han advertido, en este sentido, de que a partir de agosto la situación del trasvase volverá a nivel 3, por lo que según las reglas de explotación actuales y futuras -este aspecto no cambia-, el trasvase mensual será de hasta 20 hm3 previo informe y según determine la vicepresidenta Ribera.
Regantes, sindicatos agrarios e instituciones no han tardado en reaccionar a esta decisión afirmando que "matará el desarrollo del sureste español", "es un capricho de la ministra Ribera que quiere acabar con el Trasvase y sustituirlo por desaladoras". El portavoz de los regantes de la provincia de Alicante, Ángel Urbina añade que " es una decisión mortal porque sin agua de calidad y a un precio asequible nuestro territorio no puede desarrollarse".