La línea que pasará desde Morella a Almassora, generará un impacto visual irreversible con 189 torres de 90 metros de altura y ningún beneficio a nuestro territorio. El proyecto tiene ya aprobados los estudios de impacto ambiental, pero la empresa todavía no ha informado sobre cuál es la finalidad del proyecto, que no dejará ni un solo beneficio en la provincia.
Esta mañana los alcaldes de Sant Joan de Moró, Atzaneta y Borriol se han reunido con el presidente de la Diputación a quien, junto a la Plataforma No a la MAT, han pedido que se pronuncie en contra de esta infraestructura que también impacta sobre la salud de las personas.
Los municipios afectados advierten que si la administración da el visto bueno a la declaración de utilidad pública del proyecto, la empresa podrá expropiar de forma forzosa los terrenos donde se proyectan estas 190 torres de alta tensión de 90 metros de altura.