CSIF denuncia la falta de personal destinado a Urgencias en esta instalación de Vinaròs. Donde los dos profesionales cada día atienden a más de 70 pacientes.
También critican que la demora para obtener una cita y poder recibir atención médica presencial roza el mes de espera e incluso en algunos casos, ha llegado al mes y medio durante el pasado mes de julio.
En ese sentido, el Plan de Vacaciones previsto por el Consell, preveía sustituciones a lo largo del año para 10 de los 22 médicos que atienden la instalación. Pero no se ha hecho efectivo ni un solo refuerzo.
Por ello, piden a la Conselleria de Sanitat que revise la situación de cada unoi de los centros y los dote de los refuerzos necesarios, además, de garantizar una atención sanitaria digna y en un plazo razonable para los pacientes.