El objetivo de estas medidas es conjugar los intereses medioambientales con la actividad económica que genera el puerto. Para ello según ha explicado el presidente de la autoridad portuaria, Francisco Toledo, se han realizado tres inversiones: la compra de una barrera oceánica anticontaminación, mejoras en eficiencia energética y la construcción de unas pantallas cortaviento que esperan ir extendiendo a las dársenas del puerto.
Según el secretario autonómico de medio ambiente y cambio climático, Julià Álvaro, todas estas medidas son necesarias ante el crecimiento del puerto. Ambas partes trabajarán de manera conjunta de cara a seguir mejorando el aspecto medioambiental de la infraestructura.