La entidad que preside Bob Voulgaris ha expresado su declaración de intenciones de pelear por el ascenso directo esta temporada con la confección de un importante plantel. Un total de 11 legadas (salvo que efectúe alguna más antes de que se cierre la ventana de transferencias) para reforzar una plantilla que ya la pasada campaña se quedó a las puertas de la Segunda División.
El común denominador del mercado albinegro ha sido el hecho de que un importante número de fichajes, hayan llegado de equipos de fuera de nuestras fronteras. Lo que demuestra el conocimiento de dicho futbol por parte de la nueva secretaría técnica castellonense.
De lo que no cabe duda es de que la opinión del nuevo técnico, Dick Schreuder, ha tenido una incidencia decisiva. No en vano tres futbolistas llegan de la liga neerlandesa, como es el caso de Vertrouwd, Mendunjanin y Daijiro Chirino. Los dos últimos precisamente del equipo que entrenaba la pasada temporada el nuevo preparador albinegro: el Pec Zwolle.
Junto a ellos las incorporaciones de Sebastian Grooning (OFI Creta), Brian Schwake (Livingston escocés), Sergio Moyita (Deinze belga), Miguel Falé (Braga B), y Mamadou Traoré (USG, belga). Tan sólo Cretaz, Villahermosa y Alberto Jiménez proceden de equipos españoles.