30ytantos: Hilos Japoneses
Hoy en el 30ytantos hacemos un paréntesis entre maquinas estéticas para hablar de algo que está siendo una revolución y que a tenor de vuestras consultas parece que no hay mucha información. Me refiero a los Hilos Mágicos o Japoneses, esos que bien aplicados en la cara, cuello, escote o en la cara interna de brazos o muslos tensan la zona y eliminan la flacidez.
La historia de los hilos tensores tiene ya unos cuantos años. En los 90 aparecieron los de oro, no reabsorbibles y con unas espículas o anzuelos que al meterlos se agarraban a la piel lesionándola. En 2000 irrumpieron los reabsorbibles con espículas y en 2010 los reabsorbibles sin ganchos ni anzuelos. Toda una innovación en la medicina estética con resultados muy buenos.
Hilos tensores hay muchos en el mercado pero los Japoneses, a los que se les conoce así, son solo unos. Responden a las siglas de JBP y tienen lo que no tienen el resto, estudios clínicos que avalan la eficacia.
La Dra. Vicenta Mª Llorca Pérez asesora científica de la firma fue quien hizo En Europa un estudio clínico con 1.000 pacientes para ver cómo se comportaba el producto y cual era la técnica de aplicación más adecuada, porque lo que hace que la piel se tense es la red de vectores que el medico estético crea para sujetar los tejidos. Hay que saber en qué plano de la piel se pone. El facultativo tiene que hacer un curso de formación para poder comprarlos e inyectarlos y el paciente debe exigir la acreditación para asegurarse de que el medico que le va a hacer el tratamiento puede, porque sabe, hacerlo.
Estos hilos están hechos de polidioxanona una sustancia muy segura que se utiliza en cardiología y oftalmología. No es un relleno. El objetivo de los hilos es mejorar la calidad de la piel produciendo un efecto lifting suavizando las arrugas. El hilo que es como un cabello, se inyecta con una aguja casi tan fina como el hilo en la dermis de la zona a tratar creando vectores de sujeción. Alrededor de los 6 meses ese hilo es reabsorbido totalmente por el cuerpo pero sigue el entramado de colágeno que ha creado a su alrededor perdura hasta los 12-18 meses. Se inyecta en muy poco tiempo y para que no moleste se aplica anteriormente crema anestésica. No necesita ni reposo ni nada. Te lo haces y sigues con tu vida porque no se nota nada, salvo en ocasiones la zona un poco roja o hinchada.
Por cierto que los Hilos Japoneses se diferencian de otros tensores inyectables en que éstos son sólidos y permanecen donde el médico estético lo inyecta. Así que ponte en buenas manos. Yo he visto resultados espectaculares en caras y mentones pero sobre todo en cuello y escote.
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Mil besos