Barcelona incorpora 17 nuevos radares en zonas limitadas a 30 quilómetros por hora que, durante este último trimestre del año, no multará.
De momento, los radares se encuentran en lo que se conoce como fase pedagógica, que tiene el objetivo de dar a conocer a los conductores la presencia de estos nuevos radares. 12 de ellos se situarán en entornos escolares, y 5 más en otros puntos de la ciudad que el Ayuntamiento considera de riesgo en caso de circular a velocidades inadecuadas.
Según ha detallado la Consejera de Movilidad de Barcelona, Laia Bonet, el objetivo no es multar, sino concienciar a la gente de los peligros del exceso de velocidad en la ciudad.
Durante este mes de septiembre, entonces, una pantalla instalada a pocos metros del radar informará a los conductores de la velocidad a la que van. En caso de que esta sea superior a los 30 quilómetros por hora, recibirán una notificación informativa entre octubre y diciembre.
Estos radares empezarán a ser efectivos a nivel sancionador a partir de enero de 2023.