Memoria histórica

La ARMH comunica la identicación de los restos de un palentino represaliado durante la Guerra Civil

ARMH

Onda Cero Palencia

Palencia | 19.08.2021 18:55

La ARMH identifica los restos de un palentino represaliado durante la Guerra Civil | ARMH

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Palencia (ARMH) comunica que el Banco de ADN, vinculado al Departamento de Relaciones Ciudadanas a través del Instituto Navarro de la Memoria, ha logrado identificar los restos de Emiliano Miguel Portugal, vecino de Dueñas, fugado del Fuerte de San Cristóbal, que fue asesinado en 1938 en Larrasoaña, cuando huía a Francia.

El Fuerte de San Cristóbal, el penal más duro de la dictadura franquista, está situado en lo alto del Monte Ezkaba en Navarra. En ese penal encerraron a miles de presos políticos republicanos -190 palentinos - que fueron sometidos a castigos y hambre sin cesar, vigilados por funcionarios de prisiones y por el ejército franquista. Pero el 22 de mayo de 1938 un puñado de presos -uno de ellos palentino-, se adueñó del Fuerte, abrió las puertas a los 2500 compañeros que había ese día y 800 decidieron fugarse hacia Francia, pero las autoridades franquistas fueron informadas, de forma que pronto se organizó su persecución que derivó en una masacre: únicamente tres (o cuatro, según algunas hipótesis) consiguieron llegar a Francia. El resto fueron detenidos, muchos conducidos de nuevo al penal y 206 fueron asesinados tras ser capturados

Parte de los presos están enterados en el denominado Cementerio de las Botellas. Al principio, los presos del Fuerte de San Cristóbal eran enterrados en fosas comunes en cementerios de pueblos de la zona, pero los alcaldes protestaron porque ya no quedaba sitio para sus muertos y el director del penal improvisó un camposanto alrededor del fuerte. Según Carratalá, histórico preso ya fallecido: "Cada día se moría de hambre ahí una persona y la teníamos que enterrar, meterlo en la nieve durante el invierno, hasta que venían a buscarlos. Y a esos los llevaban a ese cementerio. Aquello fue un sufrimiento tremendo". Cuando el penal se convierte en hospital, entre 1.942 y 1.945, hay constancia de la muerte de 131 presos, la mayoría por tuberculosis, que son enterrados en el cementerio del fuerte, pero no hay cruces ni lápidas como es usual en un camposanto. Eran enterrados con una botella entre las piernas, que dentro contenía un papel que recogía su nombre y las causas de su condena y muerte.

El trabajo de mucha gente ha hecho posible la recuperación de los restos de Emiliano. Con ésta son ya 30 las identificaciones de restos por el Banco de ADN de Navarra, aunque quedan todavía numerosos restos exhumados por identificar. Actualmente hay 274 expedientes abiertos, pero quedan muchas familias por contactar y restos por localizar, así como muestras genéticas que puedan permitir nuevas identificaciones.

Para lograr estas identificaciones, es necesario un largo proceso de investigación y recogida de testimonios. En este caso, ha sido la iniciativa de la ARMH en Dueñas y el contacto con los familiares de Emiliano Miguel Portugal y por la toma de las muestras de ADN que han permitido la identificación.