La Muestra de Cine Internacional de Palencia ya tiene fechas para su próxima edición, la vigésimo cuarta, que tendrá lugar entre los días 21 de febrero y 1 de marzo de 2025. El festival regresa así a su calendario tradicional y prepara ya una programación que arrancará en octubre con la convocatoria para la presentación a concurso de los cortometrajes nacionales e internacionales.
Los organizadores de la Muestra —que integran la Universidad Popular de Palencia y la Asociación Amigos del Cine— se muestran satisfechos con la acogida del público en la pasada edición, que reunió a alrededor de 11.400 espectadores en las más de 50 actividades programadas, y confían en «fortalecer las alianzas con los principales agentes culturales de la ciudad y de la provincia», como la Biblioteca Pública, el Campus de la Universidad de Valladolid en Palencia, el Centro Cultural Provincial, el Teatro Principal, el Museo de Palencia, la Fundación Díaz-Caneja y otros enclaves en la provincia como el Auditorio Municipal de Guardo (AMGU), el Teatro Jesús Meneses de Villamuriel de Cerrato y el Centro de Artes Escénicas Jorge Manrique de Paredes de Nava.
«Ésta ha sido una de las ediciones más ambiciosas a nivel de programación que hemos celebrado en los últimos años, con más escenarios y sedes, con una expansión por la provincia que ha permitido llevar la cultura y los nuevos lenguajes audiovisuales al medio rural y con un programa de actividades que se ha abierto a la danza, a la reflexión o a los talleres formativos dirigidos al público joven», destaca Fernando Méndez, uno de los coordinadores del festival, quien se muestra confiado en dar continuidad a ciclos como «A través de lo real» o «Vídeodanza en el Museo», dos de las novedades que protagonizaron la pasada edición del certamen.
Una filosofía, añade, que «debe convivir con esa mirada participativa que define la Muestra desde su creación. El trabajo que realizamos con los clubs de lectura, con los internos del Centro Penitenciario de La Moraleja, el Consejo de la Juventud o con los usuarios de los Centros de Acción Social y los mayores de la residencia de San Telmo tiene un innegable valor social».