La Escuela de Catadores ha reanudado su actividad, centrada en la promoción del vino, con la celebración de la Junta de Gobierno del Colegio de Enólogos de Castilla-La Mancha en sus instalaciones.
La decana de este organismo, Milagros Romero, valoró el conocer estas instalaciones y darlas a conocer a los enólogos en activo de Castilla-La Mancha y a las empresas del sector vitivinícola.
“Son unas instalaciones muy bien preparadas que, con seguridad, aprovecharemos también en el futuro para realizar otro tipo de actividades, bien formativas, charlas o catas”, apuntó.
Por su parte, Santiago Lázaro, alcalde de Campo de Criptana y responsable del área de agricultura, adelantó que ya se está estructurando un calendario de actividades en la Escuela de Catadores, para lo que queda de año y de cara a 2022.
Igualmente comentó que se llegará a un acuerdo con el Colegio Regional de Enólogos para realizar determinados eventos, como ya se hace con Fenavin. “Para que la Escuela de Catadores cumpla, en definitiva, el objetivo por el que fue creada; que no es otro que la promoción de nuestros vinos que, unidos al turismo, son sin duda un elemento clave para el desarrollo económico de la localidad”.
En este sentido, Lázaro adelantó también que, para principios de 2.022, se habrá finalizado la musealización del molino “Inca Garcilaso” para transformarlo en un Centro de Interpretación del Vino. Una actuación que será posible gracias al convenio que el Ayuntamiento ha suscrito con la D.O. La Mancha.